La depilación láser diodo es un método de eliminación permanente del vello mediante un dispositivo que emite un láser que penetra en la piel y actúa sobre los folículos pilosos, destruyéndolos para inhibir el crecimiento del vello de forma duradera.
La depilación láser diodo es un método de eliminación permanente del vello mediante un dispositivo que emite un láser que penetra en la piel y actúa sobre los folículos pilosos, destruyéndolos para inhibir el crecimiento del vello de forma duradera.
¿Te gustaría olvidarte del vello no deseado de manera definitiva? La depilación láser diodo es la solución más avanzada y efectiva para eliminar el vello de forma segura y duradera. Este tratamiento utiliza tecnología de vanguardia, ofreciendo una opción personalizada y precisa para todo tipo de pieles.
En nuestra clínica, contamos con equipos de última generación que garantizan resultados visibles desde las primeras sesiones, con la máxima comodidad. Ya sea que busques suavidad en piernas, axilas, rostro u otras áreas, el láser diodo es ideal para una piel más suave y sin vello.
¡Di adiós al vello no deseado y disfruta de una piel perfecta todo el año!
El láser de diodo emite una luz concentrada que es absorbida por la melanina (pigmento) del vello. La energía se convierte en calor, lo que daña el folículo piloso e impide que el vello vuelva a crecer. Es un tratamiento dirigido solo a los folículos en crecimiento, por lo que se necesitan varias sesiones.
Generalmente, se necesitan entre 6 y 8 sesiones para obtener resultados óptimos, aunque esto puede variar según el tipo de piel, el color del vello y la zona tratada. Algunas personas pueden necesitar sesiones de mantenimiento posteriores.
El láser diodo reduce significativamente el crecimiento del vello, pero los resultados pueden variar. Aunque el tratamiento puede ofrecer una eliminación permanente en muchos casos, algunos folículos pilosos pueden regenerarse con el tiempo, por lo que pueden ser necesarias sesiones de mantenimiento.
La sensación varía de una persona a otra, pero la mayoría experimenta una ligera incomodidad, similar a pequeños pinchazos o un calor intenso. Muchos dispositivos láser de diodo modernos incluyen sistemas de enfriamiento para minimizar el dolor.
La depilación láser diodo puede aplicarse en prácticamente cualquier área del cuerpo con vello no deseado, como axilas, piernas, zona del bikini, espalda, pecho, brazos, rostro (excepto cerca de los ojos) y más.
El láser diodo es eficaz en una amplia variedad de tipos de piel, incluidas pieles oscuras, ya que tiene una mayor longitud de onda que otros láseres y penetra mejor. Sin embargo, es más efectivo en vellos oscuros y gruesos. Los vellos muy claros, rubios o grises pueden no responder tan bien al tratamiento.
La duración de cada sesión depende del área a tratar. Por ejemplo, zonas pequeñas como el labio superior pueden tardar solo unos minutos, mientras que áreas más grandes como las piernas o la espalda pueden llevar entre 30 minutos y 1 hora.
Antes de la sesión, es recomendable evitar la exposición solar directa durante al menos dos semanas y no depilarse con cera o pinzas (puedes rasurarte). También se debe evitar el uso de cremas autobronceadoras. El área debe estar limpia y sin productos cosméticos.
Después del tratamiento, se debe evitar la exposición al sol durante al menos una semana y utilizar protector solar en las áreas expuestas. Es importante no aplicar calor (como baños calientes o saunas) ni realizar ejercicios intensos durante las primeras 48 horas. Además, se debe evitar arrancar el vello con pinzas o cera.
No es recomendable realizar el tratamiento si tienes la piel bronceada, ya que aumenta el riesgo de quemaduras o cambios en la pigmentación. Es mejor esperar a que el bronceado desaparezca antes de someterte a una sesión de depilación láser.
Si se realiza correctamente por un profesional y con un dispositivo adecuado, no debería dañar la piel.